Nuestras acciones y nuestra actitud ante la vida juegan un papel fundamental en nuestra salud. Tomar conciencia puede ayudarnos a estar más saludables. Esto es algo que podemos comprobar fácilmente a lo largo de nuestra experiencia vital, tenemos la responsabilidad de adquirir hábitos saludables si queremos sentirnos bien. No hay excusas, como podrás ver a continuación, tu salud depende más de ti de lo que imaginas…
Hay muchas cosas que podemos hacer por el bien de nuestra salud, es cierto que eso no nos garantiza que no tengamos ninguna enfermedad ni que evitemos ciertas adversidades. Enfermamos por multitud de factores que están implicados en nuestra salud. Sin embargo, no podemos obviar el hecho de que podemos hacer bastante por nosotros mismos.
Aunque no podamos evitar ciertas cosas, hay muchas enfermedades y malestares que sí podemos reducir e incluso disminuir su probabilidad de aparición. Lo recomendable en todo caso es hacer lo que más nos conviene para nuestra salud, tomar conciencia de qué tipo de cosas son las que nos ayudan a estar más sanos y a sentirnos mejor. Hay que mantener un buen equilibrio entre la salud física y la mental, ambas son importantes e imprescindibles para mantener una buena calidad de vida.
Tener conciencia de que debemos hacernos responsables de nuestra salud es algo de vital importancia. No podemos estar buscando fuera constantemente lo que en primer lugar debemos proporcionarnos a nosotros mismos. El autocuidado es esencial, y si no lo incorporamos en nuestro día a día, estaremos aún más expuestos a todo tipo de adversidades que mermarán nuestra salud.
Y te preguntarás, ¿qué tipo de cosas puedo hacer para cuidarme más?, ¿cómo puedo adquirir una mayor conciencia de que mi salud es responsabilidad mía? La respuestas a estas preguntas y otros muchos interrogantes los veremos a continuación…
Lo que tú puedes hacer por tu salud
¿No crees que cada persona debería responsabilizarse de su propia salud? Parece algo obvio, pero es menos común de lo que parece. Esto es debido a la falta de conciencia, ya que no podemos cuidar de algo de lo que no tenemos conciencia. El autocuidado implica conciencia y, para adquirir conciencia, ¿qué debemos hacer? Muy sencillo, hay que observar cuáles son nuestros hábitos diarios y no engañarse, ya que sabemos perfectamente lo que nos perjudica y lo que no. También sabemos qué cosas podríamos hacer que nos vienen mejor.
Vamos a proporcionarte algunas pistas sobre a lo que debes de atender en tu vida y reflexionar sobre cómo afecta a tu salud:
Alimentación
Ya es bien sabido que la alimentación es un factor básico para mantenernos saludables, no es de extrañar que debamos cuidar lo que comemos. Tampoco es necesario hacer grandes sacrificios, lo importante es que la alimentación sea variada, equilibrada y suficiente para mantener una condición física y peso saludables. Una alimentación consciente es la mejor manera de hacernos responsables de nuestra salud.
Ejercicio físico
La actividad física nos ayuda a mantenernos saludables, es algo que está más que comprobado y llega a ser una obviedad. Aún así el sedentarismo sigue en aumento, causando problemas de obesidad y acrecentando el riesgo de sufrir graves enfermedades. Es importante hacer ejercicio regularmente, adaptado a nuestra edad y condición física. No se trata de pasar de no moverse a que hagamos un esfuerzo que vaya mucho más allá de nuestras posibilidades físicas. Cualquier actividad cuenta, ya sea andar, subir escaleras, lo importantes es que te mantengas activo y en movimiento. Evita el ascensor y el transporte siempre que puedas…
Durante al menos cinco días a la semana se recomienda hacer una hora de ejercicio físico, busca el que más te motive y se adapte a ti e implícate en tu salud. Esta es la mejor manera de acabar con el sedentarismo y los hábitos poco saludables.
Descanso y sueño
El estrés forma parte de la mayoría de las personas en su día a día, y es uno de los factores que más perjudican a nuestra salud. Aprender a relajarse y desconectar es algo básico para un buen descanso y un sueño reparador. Dormir bien recarga nuestras energías para que mantengamos saludables todas nuestras capacidades tanto físicas como mentales.
No descuides tu descanso, es imprescindible si quieres cuidar de tu salud. La higiene del sueño es algo de lo que hay que tomar conciencia, puesto que no podemos tener una buena calidad de vida si tenemos problemas para dormir y descansar, es algo que está totalmente reñido con la salud.
Consumo de tabaco y otras drogas
Está más que demostrado los riesgos que tiene el tabaco para tu salud. No puedes engañarte más por mucho que digas que vas a intentar dejarlo, no va a servir de nada. Toma una conciencia plena sobre lo que supone el tabaco y otras drogas para tu salud. Esa será la mejor forma de que logres la motivación que necesitas para superarlo. Es algo que depende de ti ¿no crees? Y es algo que está perjudicando seriamente a tu salud.
Cuando te comprometas a terminar con estos hábitos que destruyen tu salud, habrás tomado conciencia sobre la importancia que tiene tu autocuidado y sobre lo que puedes hacer por ti para estar más saludable. ¿Por qué esperar a estar enfermos y que sea demasiado tarde para tomar conciencia? Mejor hacerlo cuanto antes, el momento es AHORA.
Si no eres fumador, evita dentro de lo posible todos los espacios con humos, ya que también el fumador pasivo acaba por poner en riesgo su salud.
El alcohol, otra de las drogas legales, es una de las sustancias que más vidas puede destrozar. ¿Es culpa del alcohol? No, es responsabilidad de quien lo consume sin moderación ni responsabilidad. Por lo tanto, sí que puedes hacer algo en este aspecto también por tu salud.
Actitud ante la vida
Como hemos indicado, el estrés es algo que nos perjudica a la larga muy seriamente. A través de nuestra actitud podemos entrar en un estado de calma. Es cuestión de actitud no sufrir más de lo necesario y no desesperarse ante las adversidades. Está claro que no podemos controlar multitud de circunstancias que nos rodean, lo que si podemos controlar es la actitud que vamos a tener ante esas circunstancias. Decide tener una actitud que te haga sentirte mejor y resulte saludable.
Sexualidad y relaciones sentimentales
La salud sexual es un indicador también de un buen estado de salud. No descuides tu sexualidad, y ten en cuenta que no importa si tienes pareja o no. Eres un ser sexual independientemente de si estás con alguien o no, y puedes aprender a disfrutar de tu sexualidad igualmente. Aprende primero a saber lo que te gusta y qué es lo que te motiva. Aprende a expresarlo y a decir que no ante lo que no te guste. Tu salud mental está en juego.
Reflexiona sobre el tipo de personas con las que te sueles relacionar, si habitualmente sufres desengaños, tienes conflictos y acabas muy dañado, lo aconsejable es que revises que quizás estés con personas que no te convienen. En tu autocuidado está implicado también las personas con las que te relacionas. Cuídate relacionándote con personas que te valoren y que te acepten por lo que eres.
En definitiva, la base para disfrutar de una buena salud está muchas veces en cambiar nuestros hábitos, tal y como propone el método Crear Salud. Necesitamos nutrirnos adecuadamente y activarnos haciendo cosas que aporten a nuestro bienestar integral.
Pero, además, es muy importante cuidar de nuestra salud mental, y para ello puedes ayudarte de nuestra app Siente – que puedes descargarte aquí – y que se compartirá en una gran aliada en tu camino a una vida saludable. Su metodología es sencilla de usar, pues incluye el mindfulness y la psicología positiva para mejorar tu bienestar, reducir el estrés y, de paso, ser más feliz.