Actualmente la ansiedad se presenta en nuestras vidas de una forma casi constante: es extraño hoy día que no experimentemos ansiedad. Se presenta como una respuesta emocional que afecta tanto a nuestra mente como a nuestro cuerpo. Una mente llena de preocupaciones está disparando nuestra ansiedad ante toda clase de estímulos, es por esto que la meditación es un excelente antídoto para contrarrestar sus síntomas.
En un mundo como el nuestro en el que no paramos ni un momento, siempre estamos bajo las exigencias de obligaciones y responsabilidades. Atendiendo a multitud de cosas en un corto espacio de tiempo. Hemos ido siendo presos del tiempo y esto hace que apenas tengamos un momento para dedicárnoslo, para atendernos y relajarnos. Nuestra mente está siempre en todos lados menos en el momento presente, por lo que nos perdemos disfrutar del aquí y ahora.
Los trastornos de ansiedad han ido en aumento, forman parte de esta sociedad en la que vivimos. No es de extrañar que experimentemos alguna crisis a lo largo de nuestros días. Los trastornos del sueño, las tensiones musculares, problemas con la alimentación y el agotamiento tanto físico como mental son algunos de los síntomas que se producen debidos a la ansiedad. Intentar tapar cada uno de estos síntomas es ponerse una venda en los ojos para no solucionar el problema real.
Las tensiones vuelven a aparecer una y otra vez, y los síntomas lejos de solucionarse se van transformando en otros nuevos. La raíz de todo esto está en nuestra mente. Calmar nuestra mente, adquirir otra perspectiva de vida y ser más flexibles son soluciones reales, a las que podemos llegar gracias a la meditación.
Cómo nos puede ayudar la meditación ante la ansiedad
El enemigo, por supuesto, no es la ansiedad, ni sus síntomas, todo este repertorio aparece para alertarnos de lo que no estamos haciendo bien: de la falta de atención y dedicación que estamos teniendo hacia nuestras necesidades reales. No se trata de erradicar la ansiedad para que no vuelva a aparecer, sino más bien lograr que sus síntomas no se manifiesten tan a menudo. Conseguir esto significa estar prestando atención a la sabiduría de nuestra naturaleza.
A la práctica de la meditación, como sabemos, se le reconocen beneficios muy poderosos, que además han sido comprobados por la ciencia. Existen incluso estudios que indican que la meditación puede alterar partes de nuestro cerebro, transformándolo para nuestro mayor bienestar. Esto hemos logrado saberlo a través de resonancias magnéticas, viendo lo que ocurre en el cerebro en un estado de meditación.
Las personas que practican habitualmente la meditación desarrollan habilidades mentales que les ayudan a concentrarse mejor. Y esto se mantiene y se extiende a lo largo del día, en los momentos que ya no estamos meditando. También se ha demostrado que la práctica de la meditación está relacionada con un aumento en nuestro cerebro de la materia gris, en zonas como el hipocampo y las áreas frontales. Esto tiene que ver con la estabilidad emocional y las emociones positivas.
¿Es posible entonces reducir la ansiedad mediante la meditación? La respuesta es clara, con estos hechos acerca de cómo nos influye la meditación todo nos hace indicar que sus beneficios reducen los síntomas de ansiedad. Además, ¡tú mismo puedes comprobarlo! Al calmarnos y reducir el ruido mental al que estamos acostumbrados, se abre ante nosotros una experiencia de tranquilidad y bienestar.
Beneficios de reducir la ansiedad
Como es de esperar, una vez hayamos aprendido a reducir la ansiedad, nuestra vida dará un vuelco de 180 grados. El aprender a respirar y a estar concentrado te permitirá atender más a lo que vives que a lo que viviste o esperas vivir. Aprenderás a estar en tu presente, eso es uno de los síntomas más característicos cuando se reduce la ansiedad. Puesto que la ansiedad tiene mucho que ver con los pensamientos de lo que nos queda por hacer, y lo que hicimos y podríamos haber hecho. Esto solo nos sirve para generar sufrimiento, malestar, impotencia y, desde luego, ansiedad.
Es por esto que la meditación nos enseña los beneficios que tiene reducir la ansiedad. Y, sin duda, uno de los más importantes es poder vivir el momento presente, atender a lo que está ocurriendo sin distracciones. Esta atención plena es tan poderosa que incluso alivia y reduce el dolor, tanto el físico como el emocional. Por supuesto, esta práctica, además, tiene la ventaja de que puede combinarse con cualquier otro tipo de actividad que nos ayude a reducir el malestar producido por una alerta desproporcionada.
Es aconsejable la meditación tanto para trastornos relacionados con la ansiedad, como para los relacionados con el estado de ánimo, como es la depresión. Ya que ayuda a reducir sus síntomas, a ser más flexibles y tomar otra perspectiva ante la vida. Como hemos comentado anteriormente su práctica puede dar un vuelco a la vida de cualquier persona. Al principio es habitual que cueste un poco más hacer la meditación, ya que tenemos una tendencia a quedarnos anclados en nuestros pensamientos y a distraernos con facilidad.
Pero el hecho de ejercitar el poder estar centrado en la respiración y observando los pensamientos que circulan por nuestra mente, que vienen y desaparecen, supone un ejercicio en el que, cuanto más practiquemos, más preparados estaremos para no ser esclavos de nuestros procesos mentales.
Esto significa tomar las riendas de nuestra vida, tanto para atender a nuestras necesidades reales, como para no distraernos con aquello que no nos deja disfrutar ni ser felices. Aprendiendo a reducir la ansiedad con la meditación no solo estamos aprendiendo una técnica efectiva, sino que además estamos adquiriendo unos valores y unas conductas que nos hacen darle más sentido a todo lo que está a nuestro alrededor, incluyendo el amor y el respeto hacia nuestra propia naturaleza.
En conclusión, la base para gestionar el estrés y la ansiedad está muchas veces en cambiar nuestros hábitos, tal y como propone el método Crear Salud. Debemos ser conscientes de que para combatir el estrés no basta solo con aprender a relajarnos, sino que también necesitamos nutrirnos adecuadamente y activarnos haciendo cosas que aporten a nuestro bienestar integral. Herramientas como la app Siente – que puedes descargarte aquí – pueden ser grandes aliadas en tu camino a una vida libre de estrés. Su metodología es sencilla de usar, pues incluye el mindfulness y la psicología positiva para mejorar tu bienestar, reducir el estrés y, de paso, ser más feliz.
Imagen destacada vía: Pixabay / katerinaknizakova
Qué buen artículo!!!
Gracias por tanto…