Para poder estudiar de forma eficiente es necesario potenciar la concentración, y esto es algo que muchas veces se nos resiste. Nos encontramos con multitud de distracciones que hacen que no podamos concentrarnos, y que nuestro empeño acabe en frustración. Adquirir y asimilar conocimientos requiere ya no solo de esfuerzo y constancia, sino además de unos hábitos que debemos de incorporar a nuestra vida cotidiana.

¿Te cuesta concentrarte? Sea cual sea la respuesta, has de saber que la concentración es algo que se ejercita, y por lo general en el mundo que vivimos actualmente, rodeados de información, tecnología, televisión a la carta, etc. Esta tarea se hace mucho más cuesta arriba. Acostumbramos a estar en muchas cosas a la vez, y esto dificulta que aprendamos a concentrarnos en algo concreto.

Si a la hora de ponerte a estudiar eres de los que se ponen a recordar y a realizar otras actividades que tenías pendientes, estás cayendo en un hábito que perjudica seriamente tu concentración. Estás cayendo en el error de la procrastinación: ir dejando tu prioridad para más adelante, atendiendo a otros asuntos que realmente no son tan importantes, pero generalmente suelen ser más agradables.

Fuente: Pixabay rawpixel

Para dejar de atender a otros asuntos más irrelevantes y que no forman parte de tu prioridad esencial has de poner un gran esfuerzo por tu parte. Es necesario crear una autodisciplina para que administres tu tiempo, y no le acabes dedicando todo un día pensando en lo que tienes que hacer, para algo que te supondría unas pocas horas. Y una vez que te mentalices en que debes de atender a tus estudios (por tu bien), la concentración es el factor por excelencia a trabajar para poder estudiar de una forma eficiente y productiva. Y te preguntarás, ¿cómo puedo concentrarme en lo que debo de hacer? Muy bien, te vamos a ofrecer unas claves para potenciar tu concentración que seguro te van a resultar de gran ayuda para que estudies.

Hábitos saludables para potenciar la concentración

Lo primero que has de tener en cuenta es que para tener a punto esta capacidad debes de estar lo más saludable posible. Encontrarte bien tanto físicamente como mentalmente es muy importante para que puedas atender exclusivamente a lo que te propones.  A continuación, te vamos a mostrar algunos de los hábitos que te ayudarán a potenciar la concentración:

• Cuida de tu alimentación y tu sueño: esto es algo obvio, necesitamos tener cubiertas nuestras necesidades básicas, como son una buena alimentación y el descanso, para poder rendir, y que tanto nuestro cuerpo como nuestra mente permanezcan activos y con energía.
• Haz descansos cuando estudies: no cometas el error de dejarlo todo para el final, es necesario que dispongas de tiempo necesario para ir sin prisas. La mente no soporta estar mucho tiempo en una misma tarea, por eso es necesario que al menos durante cada hora pares, te tomes un descanso, te levantes, andes, y vuelvas al poco tiempo a seguir con tu tarea. Volverás con la mente fresca y relajada para seguir manteniendo tu concentración.
• Aleja de ti las distracciones: el silencio es necesario para que puedas concentrarte. Por eso tienes que alejar de ti todo lo que te pueda distraer, ya sea el móvil, el ordenador, la televisión, etc. El ambiente en el que te encuentres tiene que ser lo más tranquilo posible. Y si estás en una biblioteca o un lugar donde hay ruidos, lo aconsejable es que te pongas tapones.
• Céntrate en un tema: ayudará a tu concentración que organices lo que vas a hacer, y te centres en lo que tienes previsto, de esta manera ahorrarás energía en pensar con qué te vas a poner, directamente irás a lo que tienes establecido. Pon toda tu atención en lo que estés haciendo y no vayas cambiando de tema, los cambios pueden suponer que pierdas el hilo y la concentración se vea afectada.
• Mantén un buen estado de ánimo: El estado mental en el que te encuentres puede beneficiar o perjudicar mucho a tu concentración. Si estás con ansiedad y preocupaciones constantes difícilmente podrás concentrarte en el estudio. Procura resolver los conflictos que tengas, calmar tus preocupaciones, y dedicarle toda tu atención al estudio, en el momento que has decidido.

Fuente: Pixabay geralt

Estos hábitos saludables que hemos descrito para mejorar tu concentración tienen una base que es la relajación. Tu organismo ha de estar en un estado de receptividad para que puedas asimilar todo lo que vas leyendo y estudiando. Este estado es el que te proporciona la calma. Algo a lo que, sin duda, hay que dedicarle un tiempo. Verás como sus beneficios te aportan lo que necesitas para mejorar tu concentración.

Potenciar la concentración mediante la meditación

Concentrarse, significa tener la capacidad para retirar de la mente los pensamientos acumulados, para enfocarla en un solo pensamiento o tarea. La multi-tarea es algo que nuestra mente no lleva muy bien, y precisamente es a lo que acostumbramos. Esto hace que nuestra concentración y capacidad de atención disminuya, y no es de extrañar que acabemos con muchos problemas para ofrecer la atención que merece algo concreto como puede ser el estudio.

Fuente: Pixabay stokpic

Desde hace miles de años la meditación ha servido como una poderosa herramienta para, precisamente, que aprendamos a concentrarnos. Esta práctica al basarse en la contemplación, promoviendo la calma y la relajación. Nos invita a que nos centremos en algo concreto, dejando que los pensamientos fluyan y así no nos aferremos a todo nuestro ruido mental que sirve de distracción.

Por ejemplo, algo tan aparentemente sencillo como es que mantengamos nuestra atención en la respiración, es algo que nos enseña la meditación. Comprobarás como al principio no es tan sencillo, pero e por la falta de concentración. La meditación nos ayuda a que practiquemos una y otra vez el hábito de potenciar la concentración. Esto nos va a servir, ya no solo para el estudio, sino para cualquier tarea que requiera de nuestra energía y toda nuestra atención.

Al mejorar tu concentración, abrirás un mayor espacio en tu mente para poder atender a lo que necesites, con propia voluntad sobre a lo que decidas emplear tu energía. De esta manera tu mente dejará de controlarte a ti, y tú serás quien tenga el control sobre tu mente. Comprobarás como mejorar tu concentración te aporta mucho más beneficios de lo que crees.

En conclusión, la base para gestionar la concentración está en cambiar nuestros hábitos y en ejercitar nuestra mente, tal y como propone el método Crear Salud. Pero, para ello, no basta solo con aprender a relajarnos, sino que también necesitamos nutrirnos adecuadamente y activarnos haciendo cosas que aporten a nuestro bienestar integral.

Herramientas como la app Siente – que puedes descargarte aquí –  pueden ser grandes aliadas en tus estudios. Su metodología es sencilla de usar, pues incluye el mindfulness y la psicología positiva para mejorar tu bienestar, trabajar la concentración y, de paso, ser más feliz.