Es evidente que uno de los propósitos fundamentales en nuestra vida es encontrar la felicidad. Independientemente de nuestras creencias o cultura. Cualquier persona tiene como propósito y fin el de ser feliz, esto es un sentimiento común. La gran diferencia en cada uno de nosotros reside en la forma en cómo intenta llegar a esa felicidad…

La felicidad es un concepto muy bien arraigado en cada uno de nosotros. En muchas ocasiones creemos realmente ser felices, en otras descubrimos cómo nos autoengañamos. Vivimos actualmente en un mundo que nos desorienta y confunde en cuanto a lo que es la felicidad. Nos la venden a través de muchas formas, aprovechándose de nuestro anhelo de ser felices.

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Antes de nada, cada uno de nosotros deberíamos comprender en qué consiste la felicidad. Si es algo que hay que alcanzar como un fin y llega un determinado momento en el que lo conseguimos, o es algo mucho más profundo… Si bien muchos importantes pensadores a lo largo de la historia han hecho grandes reflexiones acerca de lo que supone la felicidad, preguntándose: ¿qué es la felicidad?, ¿en qué consiste la felicidad?, ¿puede el ser humano encontrar la felicidad?, ¿se puede mantener la felicidad? Son muchas las cuestiones planteadas al respecto. Siempre ha sido un tema que a todos nos ha intrigado, y seguramente seguirá siéndolo…

Aunque en la actualidad conocemos algunas de estas cuestiones, sobre todo sabemos lo que no es la felicidad. Muchas personas nos hablan de lo que es para ellos la felicidad y nos seduce pensar que podemos hallarla. Sin embargo, cometemos muchos errores a la hora de llegar a este estado con el que deseamos encontrarnos. También esa ansiedad en busca de la felicidad nos juega malas pasadas. A continuación vamos a tener en consideración algunas cuestiones sobre lo que sabemos que no es propio del estado de felicidad… Para que al menos pongamos nuestra atención hacia lo que nos pueda acercar a este estado.

¿Qué es la felicidad?

Como se ha comentado anteriormente, el concepto de felicidad es algo que muchos pensadores, en cualquier época, han intentado definir. Existen aspectos comunes en los que la mayoría están de acuerdo, pero a la hora de elegir el concepto que mejor refleje lo que es la felicidad, al final nos damos cuenta de que depende sobre todo de la experiencia de cada persona, ya que no existe una definición exacta. Analicemos algunas de las reflexiones más destacadas, de filósofos y pensadores con una gran importancia universal:

• El secreto de la felicidad no se encuentra en la búsqueda de más, sino en el desarrollo de la capacidad para disfrutar de menos. Sócrates

Para uno de los más famosos filósofos de la historia, Sócrates, la felicidad no proviene de las recompensas externas o del reconocimiento, sino más bien del estado interno. Piensa que reduciendo nuestras necesidades seremos capaces de valorar aquello que es más simple, y por lo tanto estaremos más cerca de la felicidad.

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• El hombre que hace que todo lo que lleve a la felicidad dependa de él mismo, ya no de los demás, ha adoptado el mejor plan para vivir feliz. Platón

Para el discípulo de Sócrates, el conocido filósofo Platón; la felicidad radica sobre todo en el crecimiento personal. Siendo el fruto de los pequeños logros conseguidos por uno mismo, sin necesidad de compararse con nadie.

• Los hombres olvidan siempre que la felicidad humana es una disposición de la mente y no una condición de las circunstancias. Jhon Locke

También Locke entiende que la felicidad no es algo externo, una meta a la que alcanzar o algo que conseguir. Sino que es algo que independientemente de las circunstancias radica en nosotros, y a través de nuestra capacidad mental podemos hallar esa felicidad que todos tenemos.

• No hay un camino a la felicidad: la felicidad es el camino. Buda Gautama

La filosofía que forma parte del budismo entiende que la felicidad no es lo que conseguimos para llegar a la meta, es lo que hacemos para intentar conseguirlo. Por lo tanto encuentra la felicidad como el camino que recorremos, no la meta en sí. Son las experiencias lo que nos enriquecen no los resultados obtenidos. Ya que conseguir cosas solo nos produce una satisfacción efímera que nada tiene que ver con la felicidad, que tiene que ver con algo más permanente.

Estas frases filosóficas sobre la felicidad nos ofrecen muchas pistas sobre lo que universalmente se ha entendido acerca de la felicidad. Poner atención a estas claves nos acerca un poco más a lo que cada uno de nosotros debemos hallar a través de nuestra propia experiencia.

¿Dónde reside la felicidad?

Como hemos podido comprobar en las anteriores reflexiones, en la actualidad entendemos la felicidad de un modo muy superficial. Las grandes marcas nos venden su concepto de felicidad que reside en la obtención de bienes materiales. También se cree que la felicidad reside en tener una familia, alcanzar el éxito, llevar a cabo nuestras ilusiones, etc. Todo esto nos ayuda a obtener satisfacción personal, pero la felicidad tiene más que ver con nosotros mismos. Independientemente de las metas a conseguir, la felicidad se halla en el camino.

El desarrollo personal por tanto estaría muy implicado en este proceso. Podríamos decir que la felicidad tal y como la describen los grandes pensadores reside en nuestro crecimiento personal, en los aprendizajes y lo que hemos ido construyendo en base a las experiencias vividas. Es el trayecto hacia el propio descubrimiento personal.

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También encontrarse en paz con uno mismo aporta una serenidad y alegría que tiene relación con la felicidad. Las personas más felices que hemos visto no lo son precisamente por todo lo que tienen, sino porque valoran los pequeños detalles y son capaces de dar amor de una forma incondicional. Una persona feliz no compite con los demás, no se compara, no tiene la necesidad de demostrar su éxito, no juzga ni se queda a la espera de recibir todo lo que da. La persona feliz va mucho más allá, disfruta del camino pues percibe que su felicidad está en él.

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