Tu bienestar cotidiano puede quedar interrumpido por cómo interpretas las circunstancias externas. Los factores externos forman parte del escenario de realidad de cada día. Ser optimista no significa negar esta evidencia. Sin embargo, al gritar, incrementas tu nivel de malestar y de intranquilidad.

Este hecho, además, influye en tus relaciones con los demás. Aunque a veces justifiques tu reacción, puedes cambiar tu respuesta ante ese tipo de situación en la que observas esta consecuencia, tomando conciencia de cómo afecta a tu bienestar ese cambio.

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Por medio de la meditación, el mindfulness y la psicología positiva puedes transformar tu vida de manera significativa porque tu realidad cotidiana cambia cuando tú evolucionas a nivel interno. Es decir, cuando el cambio nace de ti, también observas la vida desde una nueva mirada. Mientras que los gritos no solo no resuelven nada sino que empeoran la situación y te producen un desgaste innecesario, el mindfulness te ayuda a acompañarte y a escucharte.

Las personas que son especiales para ti, por ejemplo, tu mejor amigo, pueden apoyarte con su tiempo y su escucha cuando necesitas hablar de aquello que te ocurre. Sin embargo, mientras que otras personas están contigo en algunos momentos, tú tienes la oportunidad de estar realmente presente en tu vida siempre. Y cuando gritas, pierdes la paciencia, por tanto, te alejas de esa dirección tan esencial de la presencia. Es hora de que descubras cómo dejar de gritar puede transformar por completo tu vida.

Tendrás una transformación personal

Un hecho muy positivo es que te observarás desde una nueva perspectiva, no solo la realidad exterior tendrá una nueva luz, sino que también descubrirás habilidades que te hacen ser único. Desarrollarás nuevos recursos, técnicas y herramientas de empoderamiento personal para vivir algunas de esas situaciones, como una oportunidad para aprender, crecer a nivel interior y evolucionar.

A través de esta misión, sales fuera de tu zona de confort habitual, rompes con la dinámica de este esquema de comportamiento que al ser repetido siempre produce similares resultados. Por ejemplo, negatividad. Si quieres llegar hasta un resultado distinto, tienes que romper con esta dinámica.

Vivirás más y mejor el presente

Cuando existe un asunto que por alguna razón te preocupa, cuando vives una discusión o cuando algo te afecta como un imprevisto que altera tu rutina habitual, tu vida mejora notablemente cuando el gritar deja de ser una opción y te centras en otras alternativas de comportamiento.

Por ejemplo, puedes concentrarte en resolver ese asunto analizando las distintas posibilidades en el plano de la acción. Decides desde la libertad que tienes como ser humano. Pero cuando gritas, limitas este potencial porque te sientes encerrado en la negatividad.

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Te servirá para mejorar tu autoestima

Tu vida cambia cuando dejas de gritar porque sientes que tú tienes el control ante una situación, en lugar de llevarte todo al plano personal. Este aprendizaje es posible pero también un reto de desarrollo personal. Por ello, al ir avanzando en metas que están unidas con esta dirección, sientes cómo tu autoestima crece al igual que tu nivel de autoconfianza. Y esta autoestima eleva tu nivel de resiliencia, por el contrario, los gritos fortalecen la frustración.

Si tiendes a resolver tus conflictos internos y sociales a través del grito, te invitamos a aparcar esta conducta para descubrir una nueva vida más plena y tranquila.

Y en esto te puede ayudar el método Crear Salud, que se convertirá en tu mejor compañero para llevar la atención plena y la meditación a tu día a día. Además, en este método también fomentamos y aconsejamos sobre una correcta nutrición y una vida más activa.

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